Volkswagen Gol GTi - 1991   Gol con rabia   Revista Parabrisas Nro 161. Diciembre de 1991

El Volkswagen Gol GTi, con motor dos litros a inyección y equipamiento completo, es un derivado con prestaciones deportivas del doméstico y exitoso modelo GL

En Brasil, el VW Gol, es el gran éxito de ventas del la última década. El doméstico GL de 1600 cm3 ocupó un lugar grande en la preferencia de un público que alguna vez se inclinó por el hoy perimido "Escarabajo". Pero no bastaba con el GL, ni tampoco con el sucedáneo el Gol GTS con motor de 1.8.

Así, a fines de 1988 Autolatina lanzó al mercado brasileño el Gol GTi, un auto originado en aquel, con el que comparte casco y plataforma, pero con otras disimilitudes tan marcadas como pueden tener el día y la noche.

El GTi nacido hace tres años basa en su motor de 2 litros tipo AP-2000 (hasta entonces privativo del Santana) pero con inyección electrónica, sus prestaciones que lo convierten en algo muy cercano al auto deportivo. 

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Fue este el primer auto brasileño con ese moderno recurso de alimentación y, pensado inicialmente como una versión complementaria, ganó rápida aceptación por su potencia, relación peso-potencia y aún relativa economía, habida cuenta de sus valores de aceleración y velocidad final.

Ahora, como uno de los resultados del Protocolo 21, el GTi es ofrecido en Argentina donde, como en origen, su valor supera largamente el de dos GL... Es que no solo motor e inyección caracterizan la diferencia entre uno y otro modelo; frenos delanteros de discos ventilados (atrás se mantienen los de campana y patín), cubiertas de alta performance 185/60 HR 14" y equipamiento completo (butacas ergonométricas Recaro, vidrios totalizados, levantavidrios eléctricos, volante forrado en cuero, limpia-lava luneta, faros suplementarios, alarma antirrobo y espejos orientables eléctricamente). Solo se obvia el aire acondicionado, ofrecido empero como opcional.

Puesto de conducción del GTi. Se destaca lo completo del panel, aunque falta el manómetro de aceite

Nueva versión, poco cambio

Este año, el GTi sufrió el primer rediseño desde su lanzamiento. Como sucede en el fútbol, en que no se cambia un equipo cuando va ganando, Autolatina fue mesurada con las mejoras introducidas. Apenas una sutil modificación en la trompa y la parrilla, con proyectores de menor tamaño y líneas mas redondeadas (todos elementos semejantes a los de nuestro nuevo Gacel), luces traseras y de posición que apuntan a una mayor seguridad, llantas de nuevo diseño iguales a las del futurista Volkswagen Orbit y dos nuevos colores de carrocería -el gris y el rojo- que se agregan al hasta entonces único azul marino metalizado.

También cambió el tablero de instrumentos -muy completo pero donde sigue faltando el manómetro de aceite- que ahora se ilumina con una discutible luz anaranjada, como el pasacintas.

Pero el punto fuerte de este auto sigue siendo el motor y su comportamiento. Con la inyección -que optimiza el desempeño y controla el consumo- y un peso de solo 970 Kg, el GTi es rápido y nervioso como un buscapié, aún manteniendo muy razonables condiciones de economía en lo operativo, como lo atestiguan los 11 km/litro que gasta cuando se lo lleva a 120 km/h.

Al manejarlo, la inyección electrónica se manifiesta desde el mismo momento del arranque, con el motor frío: el dosaje justo de aire-nafta hace que al girar la llave del motor se ponga en marcha sin dilación, sin rateos ni toses, ni golpes. Ni siquiera tiene cebador, porque no lo necesita. 

Entonces sólo queda ir enganchando las marchas para que el motor responda pronta y suavemente, a lo que contribuye una caja de relaciones cortas -"arrimadas"- que se complementa con la elasticidad del impulsor, reprisando aún con una quinta muy desmultiplicada.

¿Un auto deportivo?

Puede ser que el Gol GTi no sea realmente un auto deportivo, sino lo que se ha dado en llamar un "pocket rocket", aludiendo a los autos pequeños, potenciados por las fábricas para acercarse al deportivo. Sin embargo, el que lo tiene o el que lo busca, olvidando su precio le perdona sus "defectos sport"; baúl mezquino en dimensión, alto nivel de ruido, incomodidad para los pasajeros "de atrás" y visibilidad limitada por el alerón (ahora rediseñado), el que juega seguramente un papel mas ornamental que aerodinámico.

En su andar, el GTi hace gala de estabilidad en curvas y eficiencia en los frenajes.

Es bueno reparar en que los mercados -brasileño y argentino, que son los que interesan- se han vuelto más exigentes. Este "Golazo" ya no causará la impresión de tres años atrás pero allá sigue reinando y aquí, tiene todo para pelear en la cresta de la ola.

Por: Heymar Lopes Nunes
Revista Quatro Rodas (Brasil)

El alerón trasero, casi un ornamento

Un auto que tiene su mercado

Brasil posee ventas anuales de 800/900.000 unidades cero kilómetro y este GTi es el primer "deportivo" de serie. 

Obviamente tiene un buen mercado, especialmente en San Pablo, donde, por la irregularidad de la geografía de dicha ciudad y sus alrededores, es bueno tener autos con potencia y de buena aceleración. Las subidas son muchas y muy variadas y además a los brasileños les encanta andar rápido. Tanto es así que ahora este GTi tendrá como rival al Kadett GSi 2.0 en el segmento de los deportivos.

Comparándolo con el GL, además de todo lo enumerado en la nota, muestra un cambio considerable en su suspensión, levemente rediagramada pero mucho más dura, que acompaña "fielmente" en el manejo deportivo, convirtiéndolo en muy confiable, especialmente en las curvas rápidas.

En ciudad el auto rebota bastante y es ruidoso. Pero hay muchos usuarios que prefieren sus particularidades.

J.F.M.

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CONCLUSIONES

Positivo

• Buena estabilidad.

• Performances.

• Butacas con regulación en altura.

Negativo

• Espacio muy chico para equipajes.

• Visibilidad trasera.

• Falta manómetro de aceite.

• Escaso espacio para pasajeros de atrás.

VELOCIDAD MÁXIMA 173.300 KM/H
Promedio de las dos mejores pasadas en sentido contrario

Nota: El test fue realizado en una pista especial de pruebas a 700 metros de altitud, con una presión atmosférica promedio de 800 milibares. Esto provoca una merma en las prestaciones en comparación con test realizados a nivel del mar

Panel de instrumentos, con números de discutible color rojizo

DOS PUNTOS FUERTES SON LA ESTABILIDAD Y LOS FRENOS, PESE A QUE ATRÁS SON DE CAMPANA

La inteligencia de la inyección

El sistema de inyección despiezado, donde pueden observarse elementos tales como el múltiple de admisión, los inyectores, el filtro y la "caja negra", como se conoce a la microcomputadora, corazón del sistema

Desde hace más de un lustro la industria argentina produce un automóvil con motor naftero, a inyección electrónica. Vale refrescar sin embargo algunos conceptos acerca de esta pequeña computadora -que eso es- que forma parte del sistema de alimentación de los motores mas evolucionados.

La inyección recibe informaciones de las condiciones de ambiente y trabajo y del pie del conductor y toma decisiones en consecuencia. Decide cual es la cantidad de combustible que va a mandar a los cilindros en cada momento y el instante exacto en que cada bujía debe producir su chispazo para la deflagración.

Hace más cosas. Evita la detonación -vulgo pistoneo- mandando atrasar inmediatamente el encendido cuando percibe la más mínima vibración que la preanuncia. En el momento del arranque calcula el abastecimiento de la cantidad exacta de combustible y la relación conveniente de aire para que el motor se ponga en marcha inmediatamente. Por eso no se necesita cebador.

Y cuando el motor esta caliente, el sistema empobrece la mezcla aire -combustible lo que indirectamente redunda en el medio ambiente ya que los gases de escape son menos contaminantes de la atmósfera.

Vea también

Road Test del Volkswagen Gol GTi 2000
Revista Parabrisas Nro 161. Diciembre de 1991